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JULIO AZOR // Las llaves que me salvaron

 

Publicado por la editorial Juglar en su colección Aylor, este poemario nos advierte ya en la contraportada que el autor, Julio Azor, va a aconsejarnos a través de su experiencia personal sobre la propia vida. 

Sobre la elección del título el poeta nos refiere en las primeras páginas que el escritor Mario Benedetti, en los tiempos de temor en la ciudad de Buenos Aires, llevaba siempre cinco llaves pertenecientes a las casas de cinco amigos que, según él, lo salvaron, 

El libro, con prólogo de Asunción Caballero, aborda una gran suma de temas, de entre los que destacan el amor, la amistad, el compañerismo o el paso de la vida. Dentro de los recursos literarios que encontramos en sus versos se hallan: una anáfora en el poema número 27 (pág.76), que le aporta cierto ritmo a los versos; un hipérbaton en el poema número 17 (pág.55), al comienzo de la primera estrofa, y que se ordena al comienzo de la segunda para jugar con nuestro nivel lector. Y finalmente una serie de metáforas en el poema 5 (pág.25), como “bebo alas” o “rompo hielo”, para animarnos a entender más allá aquello que nos dice.

Es difícil para mí escoger aquellos poemas que me gustan más, debido a que son un gran número de ellos. Sin embargo, citaré algunos:


Un poema sutil               

Casi ni te vi apenas.               

Me temblaron las piernas.           

Desorientaste mis venas.           

Despedazaste mis esquemas.

Maravillaste mis arenas […]       

Fue un instante sin fin.           

Fue un segundo inmensurable.       

Fue un momento sutil.           

Muy sutil e inolvidable.



Nunca callaré
Cerraré mis labios
cuando mi canto
sea el del pueblo.

Caminos
Caminos la vida,
la muerte, los sueños.
Camino se hace al andar.


El libro, publicado por la editorial Juglar, me ha sorprendido por su expresividad, debido a que con cada poema te transporta a diversos lugares y épocas que él ha vivido a lo largo de su vida. Surgen temas como la homosexualidad (página 37, poema 12), la guerra (página 51, poema 16), el feminismo (página 43, poema 14)… Asimismo, es bastante original: el poema número 26 se compone únicamente de dos versos (a mi suponer que es para ser más conciso con lo que se quiere decir); el poema 19 finaliza con tres palabras en mayúscula y en negrita (para enfatizar lo que dice), además de diversas palabras, en concreto pronombres personales, a lo largo de este; y el poema 19 está escrito verso por verso (solo los ocho primeros), cambiando de izquierda a derecha. 


El poemario cobra unidad al componerse de tres parte enfocada cada una a un tema distinto. En la primera se habla de la infancia y de las vivencias que más añora; en la segunda ensalza un grito de libertad por el presente; y finalmente predice cómo será el futuro junto a su fiel amiga Ada, y agradece su presencia, lo que une todas las partes del poemario a modo de metáfora de las etapas de su vida. Por otro lado, se emplean mucho las eses y las vocales, juego fónico que marca el ritmo. 


Mencionaremos para terminar la importante presencia de intertextualidad. Por ejemplo hallamos una cita de referencia al comienzo del poema 9, en la que se dirige a su madre, rememorando su niñez con ella. También encontramos una cita al comienzo del libro de Eduardo Galeano, que a su vez cita un verso de Mario Benedetti.


            *    *    *    *


        AUTOR: Julio Azor

     EDITORIAL: Juglar

     AÑO: 2021


            *    *    *    *


            DANIELA JIMÉNEZ (IES CAÑADA DE LAS ERAS)



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